En la nueva normalidad tras la pandemia del COVID-19, la agilidad tecnológica en la manufactura está dejando de ser opcional.
La industria evoluciona día con día, al igual que las nuevas tecnologías aplicadas a la manufactura, como la robótica, la analítica, la inteligencia artificial, la nanotecnología y el internet de las cosas (IoT, por su sigla en inglés), por mencionar algunos.
Estos avances tecnológicos constituyen una nueva revolución Industrial llamada Industria 4.0, donde la interconectividad, la automatización y los datos en tiempo real juegan un papel fundamental.
Ahora existe lo que se llama manufactura inteligente, la cual integra tecnología digital, aprendizaje de máquinas y big data en la producción y las operaciones físicas. Esto es lo que mantienen en sincronía todo dentro las compañías que se dedican a la manufactura y la administración de la cadena de suministro.
Si la transformación digital ya era una necesidad en todo tipo de empresas antes de la pandemia, ahora está en una etapa acelerada de adopción y pronto dejará de ser opcional.
En un futuro cercano las fábricas inteligentes comenzarán a ser la norma y su característica principal será integrar lo físico con lo virtual, donde los fabricantes y las máquinas compartirán información con la cadena de suministro, permitiendo que los procesos se optimicen automáticamente y utilizando la inteligencia artificial para completar tareas complicadas fundamentadas en flujos de trabajo complejos.
Es importante entender el potencial de esta cuarta revolución industrial porque no solo afectará a los procesos de fabricación. Su alcance es mucho más amplio, afectando incluso a la sociedad. La Industria 4.0 puede optimizar las operaciones de negocio, además de impulsar el crecimiento de los ingresos, transformado los productos, la cadena de suministro y las expectativas de los clientes.
Soluciones predictivas
Las soluciones de esta revolución, incluyen la capacidad de predecir cuándo pueden surgir problemas potenciales. El mantenimiento preventivo ocurre analizando la rutina o el tiempo operativo de acuerdo con los esquemas tradicionales. Este enfoque permitirá a tu empresa manufacturera cambiar su mantenimiento, de uno reactivo a uno predictivo.
Si deseas que tu empresa sea sostenible y escalable, la clave es utilizar herramientas que las ayuden a optimizar los procesos, aumentar la productividad y la colaboración, aprovechando la información generada en tiempo real.
La capacidad de aprender de esta información y hacer ajustes para poder reaccionar a tiempo, puede hacer que tu organización sea más abierta, proactiva y flexible, permitiendo una reducción de riesgos en materia de productividad.
Nunca más que ahora, todavía en medio de los efectos de la pandemia del COVID-19 y las lecciones que nos sigue enseñando, la digitalización de tu empresa manufacturera es esencial y urgente.
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